Glamour en 'No Son Horas' de Onda Cero

Podcast de No son horas, con José Luis Salas. Jacqueline Campos pone el toque de glamour al programa con una cama que se hace sola, además de otras noticias del mundo del lujo.

Glamour en 'No Son Horas' de Onda Cero

Podcast de No son horas, con José Luis Salas. El mejor despertador-acostador de la radio en España y Jacqueline Campos pone el toque de glamour con la nueva campaña de primavera-verano de Balmain con las supermodelos de los años noventa, entre las últimas noticias del mundo del lujo.

'Conflicto de Derechos'

COLUMNA. Sábado, 12 marzo 2016.
'Conflicto de Derechos' por Jacqueline Campos 




En vísperas de una madrugadora Semana Santa, el incipiente perfume de incienso que tradicionalmente se convierte en el ambientador de las calles de la Costa del Sol, se ha visto empañado por el hedor que desprendían las toneladas de basura tirada en las calles de la capital de la provincia. Olores e imágenes que han llegado hasta la Bolsa Internacional de Berlín ya que los propios hoteleros advertían de un frenazo acusado en las reservas para la primera temporada alta que experimenta el turismo en la costa. Y aunque el problema, que afortunadamente se ha solucionado, ha tenido lugar a unos kilómetros de Marbella, éste nos repercute.


La huelga de los servicios de limpieza pública de Málaga pone en la mesa los graves perjuicios que este tipo de conflictos laborales provoca en la ciudadanía y a los intereses generales de la ciudad. Vemos también que, muchas veces, el tratamiento que se da a las situaciones de confrontación y la actitud que adoptan los responsables políticos son muy diferentes dependiendo de su color político. Sin embargo, en Málaga ha hecho falta que los ciudadanos salgan a la calle para expresar su descontento, yo diría más bien su rabia, por la situación en la que se encuentra la bella capital de la provincia, muy cercana ya al peligro de salud generalizado ante la enorme cantidad de basura, más de 4.000 toneladas, esparcida por todas las calles y plazas de una ciudad que ha apostado justamente por el turismo urbano y cultural.


A estas alturas del siglo XXI nadie en su sano juicio puede poner en cuestión el derecho a la huelga. Realmente no solo eso, sino que nos encontramos con un derecho de carácter fundamental, pues así lo reconoce la Carta Magna, como instrumento de los trabajadores para la defensa de sus intereses. Incluso aunque la Constitución de 1978 no lo hubiera reconocido, estaríamos en una situación similar porque los Convenios de la Organización Internacional del Trabajo, de la que formamos parte, reconocen ese derecho de una forma incontestable. Sin embargo, hay que decir claramente que en un punto que afecta de forma continua a aspectos esenciales de la vida de los ciudadanos, los partidos no han dado la talla puesto que el mencionado texto constitucional también dice que la ley que regule el ejercicio del derecho de huelga establecerá las garantías precisas para asegurar el mantenimiento de los servicios esenciales de la comunidad.


Pues bien, han transcurrido ya casi cuarenta años desde que se promulgó la Constitución y, sin embargo, ninguno de los gobiernos y mayorías parlamentarias que han tenido la responsabilidad de hacer las leyes que requiere la sociedad, ya fueran de un signo o de otro, han tenido las agallas suficientes para meterle mano a esta ley que es difícil, pero es un mandato constitucional que se han pasado por el forro. Y como consecuencia de ello todos los ciudadanos tenemos que soportar lo que, en este caso, han aguantado estos días nuestros vecinos malagueños.