Columna Diario SUR. Sábado, 17 de enero 2015
'El Chacachá del Tren' por Jacqueline Campos
Me permito utilizar dos
renglones de la letra de la famosa canción de El Consorcio, otrora mi
entrañable Mocedades, con fines meramente informativos para cumplir con aquello
de la ley de propiedad intelectual. ‘Al
compás del chachachá, del chacachá del tren, qué gusto da viajar, cuando se va en exprés’ y sobre todo cuando acabas de recorrer media
España en alta velocidad o sobrevolar muchos kilómetros dentro de un avión. El
mismo hándicap de siempre, y repetido hasta la saciedad, qué triste pena que
para completar el trayecto hasta la capital turística de la Costa del Sol, haya
que terminar implorando por una conexión como Dios manda y los remolones
responsables desoyen.
Hace unos dos años, Fomento
descartaba traer el AVE a Marbella y apostaba por el Cercanías ya que al
parecer era más razonable estudiar la prolongación del tren desde la localidad
vecina de Fuengirola. Ahora nos aseguran que, en más o menos tres meses, vamos
a conocer qué se deduce del estudio sobre la mencionada prolongación. Si las
cuentas no me fallan quiere decir que antes de las elecciones municipales nos
contarán el coste, la última cifra rondaba los 5.000 millones de euros, y si
puede hacerse o no. De momento, nos siguen recordando las muchas las
dificultades, como la ausencia de suelo libre, el encarecimiento de la obra al
tener que trazarse en su mayoría bajo tierra, cuantías económicas inasumibles,
bla, bla, bla.
Pero de todas formas por muy atractivo que nos
resulte el estudio, que nadie se relama porque la denominada demanda histórica
de la provincia hasta dentro de bastantes años, nada de nada. No estamos
hablando del sueño inalcanzable de sucesivos primeros ediles de la costa de
formar parte del itinerario de un alta velocidad desde Nerja a Estepona que
reportaría máximos beneficios a nuestra ciudad, y a la postre a Andalucía. Estamos
refiriéndonos a disponer de un servicio público que cualquier ciudad española
tiene y, ya no digamos, si además se trata de un destino turístico con una
población que en temporada alta se dispara enormemente.
La llegada del tren ha supuesto durante muchos años
una auténtica revolución para cualquier ciudad del mundo desde hace ya muchos
años. Seguramente para la nuestra también supondría una gran transformación. Es
cierto que disponemos de comunicaciones por carretera con el aeropuerto que
pueden considerarse francamente buenas pero también el ferrocarril, o mejor
dicho los trenes modernos incluso los de Cercanías suponen algo realmente
distinto y de muy fácil acceso para todos.
Por supuesto que hay que tener los pies en el suelo
y ser conscientes de lo que significa en las circunstancias económicas actuales,
inversiones de la magnitud que estamos hablando. Pero no es menos cierto que se
trata de la principal actividad económica de Andalucía y de un territorio que
es la flor y nata de la economía turística de nuestra comunidad. El estandarte
del propio turismo español que, hoy por hoy, es la auténtica palanca de la
recuperación de la crisis que tanto se pregona. No creo que pudiera ser
considerado injusto que este territorio y sus ciudadanos reciban, en la mejora
de una infraestructura ferroviaria, una pequeña parte de los ingresos que la
economía nacional y regional recibe por ello.
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